AMES

Centro de Juventud en Ames, Galicia

El objetivo de este proyecto es crear un amplio espacio donde los jóvenes puedan tejer relaciones y crecer cultural y profesionalmente.

Para ello se plantea un edificio modular y de rápida construcción para economizar los costes, y con el estándar energético Passivhaus.

Diseño modular

Todo el programa está organizado en torno a la necesidad principal del centro: EL PATIO, un espacio de convivencia e intercambio que facilite las sinergias entre los jóvenes y todas las actividades emprendedoras, formativas, etc... que desarrollen.

Inicialmente se plantea la construcción en una única fase, aunque la racionalidad del sistema compositivo permite la construcción en diferentes fases según las necesidades del encargo. Cada módulo puede crecer longitudinalmente para albergar más metros cuadrados si la administración lo requiere, con lo que incluso en la fase inicial del proyecto podría ampliarse el programa inicialmente propuesto.

La ampliación en fases posteriores a lo largo de la vida útil del edificio podría realizarse con total naturalidad gracias a esa composición modular y a los sistemas constructivos "en seco" utilizados. Nuevas piezas podrían añadirse albergando nuevas necesidades de programa, y su construcción no afectaría al funcionamiento normal del edificio.

Organización

La organización del programa en “U” permite acceder al edificio desde un punto central y distribuir todas las diferentes partes del programa volcadas al vestíbulo, reduciendo recorridos, mejorando la accesibilidad, facilitando el control de accesos, la simultaneidad de usos y estimulando el encuentro e interacción entre los jóvenes.

Además se consigue adaptar todo el edificio a la orientación sur, de manera que todas las salas tienen esta orientación, y se puede ubicar la mayoría de las ventanas para aprovechar el aporte energético por radiación solar.

Materiales locales, construcción sostenible

Se ha buscado un equilibrio entre los valores de la tecnología constructiva y la simplicidad de la ejecución. Todos los materiales y sistemas constructivos pueden ser adquiridos en la propia comunidad autónoma de Galicia o como mucho en el mercado nacional Español, reduciendo los costes y la huella ecológica del propio edificio.

Apostar por buenos sistemas pasivos del edificio permite establecer la mejor estrategia para el entorno climático gallego. Una envolvente que protege de las precipitaciones, la continuidad y estanqueidad de la capa de aislamiento térmico y el control de la radiación térmica mediante la utilización de vidrios bajo-emisivos permite reducir el consumo y las emisiones contaminantes a lo largo de toda la vida útil del edificio sin hacer ningún sobreesfuerzo presupuestario inicial.

ESTRATEGIA ENERGÉTICA

SISTEMAS PASIVOS:

Construyendo una envolvente mediante un sistema en seco por capas se consigue optimizar al máximo las prestaciones de cada material.

Así, el cerramiento incorpora 140 mm de aislante mas la cámara de aire que alberga la estructura y el paso de instalaciones. Este diseño permite extender la continuidad del cerramiento a lo largo de todo el edificio controlando y eliminando los puentes térmicos que serán además sellados por bandas adhesivas.

El revestimiento utilizado es una fachada ventilada de paneles fenólico compactos, lo que proporciona una protección excelente para climas fríos y húmedos con una alta durabilidad.

Mediante las carpinterías y la baja emisividad del PVC se controla la continuidad de la envolvente térmica evitando puentes térmicos, y utilizado vidrios de baja emisividad con filtros de control solar, lo que permite reducir el consumo energético del edificio a lo largo de su vida útil.


SISTEMAS ACTIVOS:

En cuanto a los sistemas activos, se ha optado por incorporar un sistema de suelo radiante, lo que proporciona condiciones de confort térmico con una demanda energética menor debido a la temperatura de trabajo de la caldera. Además, el mismo circuito de agua será utilizado para refrigeración en verano mediante una bomba de calor incorporada en la caldera.

Respecto al consumo energético, la caldera mixta aprovecha la energía eléctrica proporcionada por los paneles fotovoltaicos colocados en la cubierta y utiliza como energía complementaria combustible de biomasa, consiguiendo reducir los gases efecto invernadero y obteniendo la mejor calificación energética posible.

Por último, una batería de paneles solares fotovoltaicos se ha dispuesto en la cubierta aprovechando la orientación del edificio para producir energía eléctrica que es utilizada tanto para la caldera en los sistemas de ACS y calefacción, como para cubrir la demanda energética de electricidad e iluminación.

Respecto al sistema de iluminación, se disponen sensores de movimiento en todas las estancias de manera que se optimiza el consumo. Toda la iluminación es tipo led de bajo consumo.

Si te ha sorprendido el carácter innovador de esta propuesta, anímate a escribirnos para saber cuánto partido podemos sacarle a ese proyecto que tienes en mente.